¿Son importante los
Valores Morales y los Valores Éticos en las organizaciones?
En general el tema de la visión,
misión y valores que en las organizaciones es algo que se implementa de forma
liviana y trivial en muchas de ellas, siendo solo declaraciones que vemos expuestas en
cuadros instalados en lugares visibles de las empresas, pero que al preguntarle
a las personas que ahí trabajan su significado, y como lo aplican en su
cotidianeidad no saben qué y como responder.
Los valores deben estar arraigados
profundamente en las acciones y comportamientos que tiene las personan al
interior de la organización así como en sus relaciones con el entorno, de no
ser así son solo palabras y sabemos que a ellas se las lleva el viento.
Es un hecho que hoy en día las
sociedades, no solo en Chile sino que ha nivel global, están siendo mucho más
exigente con todas sus organizaciones e instituciones como por ejemplo;
empresas, organizaciones políticas, poder judicial, etc. En este contexto
establecer y declarar cuales son los valores que enmarcan nuestro actuar tanto
a nivel personal como organizacional esta siendo cada vez más relevante.
Con el objeto de tener un marco de
referencia común me gustaría compartir la siguiente una definición de valores;
“Aunque suele hablarse indistintamente de valores morales y valores
éticos en este caso efectuaremos una
diferenciación entre los unos y los otros. Los valores éticos están
constituidos por una serie de normas o pautas que regulan la conducta de los
individuos, como la verdad, la justicia, la libertad y la responsabilidad.
Mientras que los valores morales se
refieren al conjunto de prácticas o costumbres comunes a una sociedad u
organización, encaminadas a establecer una diferenciación entre la manera
correcta o positiva de actuar, y la incorrecta o negativa.”
En este punto me gustaría hacerme
cargo de la pregunta, ¿Por qué es importante establecer una declaración de los
valores?. Las respuestas pueden ser muy
diversas, pero a mi juicio, una de las más relevantes es que “en cualquier
organización humana los valores determinan el marco de acciones,
comportamientos y respuestas que son posibles de observar, esperar y tolerar y por
otra parte aquellas que no lo son”. Estableciéndose de esa forma un marco
de certezas al interior de la organización, así como en la relación de ésta con su
entorno, o sea en términos más coloquiales, se lo que puedo esperar y lo que
no.
Por lo tanto, establecer, implementar y
arraigar adecuadamente este tipo de declaraciones en las organizaciones permite
que las personas en su interior establezcan relaciones de confianza que
incentiven la creación de contextos donde el trabajo en equipo, la innovación y
la creatividad pueden florecer facilitando el logro de los objetivos
organizacionales.
Por otra parte, aquellas personas que
no se sienten representadas por los valores declarados por la compañía,
tenderán a dejar la empresa por cuanto les será muy difícil acostumbrarse a llevar
a cabo todos los comportamientos, compromisos y conductas que éstos demandan. Es
importante destacar, que lo recién señalado, no atenta contra la diversidad, amplitud
de criterios y puntos de vista que toda organización requiere para ser exitosa.
En la actualidad en Chile estamos
siendo testigos de cómo la ausencia de valores esta afectando a la sociedad en
su conjunto (casos en los ámbitos empresarial y político) generando una falta
de confianza y respeto por nuestras instituciones. Uno de los principales
efectos negativos, a mi juicio, es que los niños y adolecentes aprenden
copiando de los adultos y de no existir sanciones claras desde ámbito
jurisdiccional y social ellos pueden llegar a pensar que esos comportamientos son
aceptables y normales, con lo cual ellos muy probablemente los repetirán en el
futuro.
Es importante rescatar valores que
existían en el pasado, y se me viene a la memoria “el de la palabra empeñada“ que existía en el tiempo de mis abuelos
(principios del siglo xx), recuerdo cuando él me decía que su palabra valía más
que cualquier papel escrito. Su identidad, quien él era estaba integrada con
respetar sus compromisos, no estaba sujeta a interpretaciones mañosas, juegos
de palabras, etc.
No es que crea que todo tiempo pasado
fue mejor, pero si debemos rescatar cosas importantes alguna de las cuales, que
a mi juicio, se han ido perdiendo.
Quiero terminar estas líneas
remarcando lo importante que es para el éxito y la viabilidad de largo plazo
que toda organización requiere, el definir y arraigar sus valores como las
raíces de un árbol, o sea de forma profunda en la conciencias, los
comportamientos y actitudes de todos sus colaboradores para asegurar el poder renovarse
y adaptarse a los cambios que el entorno demanda de forma exitosa.
Autor: Javier Guinguis Ch.